Islandia decide vivir en igualdad salarial.

Islandia se ha convertido en el primer país en aprobar una ley que exigirá a las empresas que demuestren que sus empleados cobran el mismo sueldo por el mismo trabajo realizado, con independencia de su género, etnia, sexualidad o nacionalidad. Esta medida, que fue aprobada por el Parlamento a principios de abril y que entró en vigor este lunes 1 de enero, afectará a las compañías privadas y a los organismos públicos que tengan en plantilla a al menos 25 trabajadores. Si no certifican que se ajustan a las nuevas políticas de paridad salarial tendrán que hacer frente a sanciones económicas.

Actualmente, las mujeres representan el 48% del Alþingi, el Parlamento islandés, y el país está liderado desde noviembre por Katrín Jacobsdottir, una de las tan solo 19 jefas de Estado o de Gobierno mujeres, de los 193 países que hay en el mundo. Desde el inicio de la publicación de informes anuales elaborados por el Foro Económico Mundial sobre igualdad de género en 2006, Islandia ha cerrado su brecha de desigualdad en un 10%, una de las evoluciones más rápidas en comparación con otros países.