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El impacto de la IA en el empleo: ¿aumento o destrucción?

Un informe recién publicado por el Fondo Monetario Internacional (FMI), fechado en enero de 2024 y denominado Gen-AI: Artificial Intelligence and the Future of Work, estudia el efecto de la inteligencia artificial sobre el mercado laboral.

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El documento subraya y advierte la desigualdad que puede crear la penetración de la IA en la sociedad desde la perspectiva del empleo, perjudicando a unos trabajadores y beneficiando a otros. Sin embargo, el Informe de Tendencias de Recursos Humanos 2024, publicado por Randstad Research y elaborado conjuntamente con la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), tranquiliza -momentáneamente- a los empleados españoles, asegurando que la pérdida de empleo está siendo “inapreciable” .

Del exhaustivo estudio que ha llevado a cabo el FMI se extrae una premisa que condiciona el análisis del impacto de la inteligencia artificial en el empleo : la diferencia entre los países con economías avanzadas y los que aún tienen una economía emergente o en desarrollo. Estos últimos se enfrentan a menos sacudidas como consecuencia de la utilización de la IA, mientras que los primeros pueden ser más susceptibles a cambios relevantes en el mercado laboral.

No obstante, el Fondo Monetario Internacional avisa de que existe una “considerable incertidumbre en torno a estas predicciones”, y de que, en última instancia, las alteraciones en el mercado de trabajo dependerán de la capacidad de las naciones para renovarse y adaptarse a la inteligencia artificial.

El colectivo más “vulnerable”

En el texto Gen-AI: Artificial Intelligence and the Future of Work, la vulnerabilidad adquiere un significado distinto respecto al que estamos acostumbrados. Porque la inteligencia artificial afecta en mayor medida a los trabajadores altamente cualificados, de modo que estos se encuentran expuestos a mayores riesgos. En este contexto, por tanto, los más vulnerables no son los más desfavorecidos, sino quienes tienen formación superior y, a su vez, ocupaciones de gran complementariedad con la inteligencia artificial.

Por el contrario, este perfil también también puede tener a su alcance más oportunidades en su carrera con la adopción de la IA. De hecho, el FMI señala que las personas con más ingresos pueden conseguir ganancias “desproporcionadas”, de forma que esa vulnerabilidad ya no sería tal. Pero para que esto sea una realidad, este tipo de trabajadores tienen que adaptarse a la nueva tecnología, algo que, por otro lado, no es fácil para todos, y así se ha constatado históricamente.

Empleos de menor complementariedad

En el extremo opuesto, los empleos menos expuestos son los que requieren mano de obra orientada al esfuerzo físico, por ejemplo, en el sector de la agricultura, como apunta el informe. La amenaza de una IA perjudicial está menos presente en estos casos. Pero sí lo está en otros, como por ejemplo los call center ubicados en países con una economía menos desarrolladas. Los trabajadores de estos centros de llamadas podrían correr el riesgo de ser sustituidos por soluciones basadas en IA.

Pero en este escenario, y en general dentro de las naciones con economías emergentes, también se halla un punto positivo. Porque, con una determinada inversión y pese a que estos países están menos preparados para su introducción, la inteligencia artificial puede contribuir a que algunos sectores despunten. Lamentablemente, el FMI no es muy optimista ante esta posibilidad, debido a que se trata de territorios con una infraestructura digital débil y una población menos capacitada en ese aspecto. Y, por este motivo, recomienda a estos países preparar cuanto antes sus infraestructuras y formar a su capital humano para atraer inversión privada y así obtener beneficios de la IA.

Conclusiones del Fondo Monetario Internacional

Los expertos del FMI dejan claro que el uso de la IA puede generar diferentes tipos de cambios en el entorno laboral según el país. Las economías más avanzadas están más expuestas a potenciales perjuicios, pero también mejor posicionadas para sacar provecho de la inteligencia artificial -lo que ocurre a la inversa en lugares del mundo menos favorecidos-. Y no se duda que habrá una redistribución de los ingresos y de la riqueza, provocando un marco de desigualdad. Ni se descarta un malestar social y exigencias de cambios políticos.

Asimismo, el Fondo alerta sobre las múltiples ventajas que puede aportar la IA en industrias que de poca afectación en lo referente al empleo. Retomando el ejemplo de agricultura, expone cómo esta clase de inteligencia podría servir para predecir resultados de cosechas o identificar plagas potenciales, mejorando así la alimentación mundial. Extrapolando este beneficio al resto del tejido empresarial del planeta, los técnicos del FMI abundan en que la inteligencia artificial puede traer prosperidad para todos los ciudadanos si se emplea “a tiempo”.

España, un clima de positividad

El anteriormente mencionado Informe de Tendencias de Recursos Humanos 2024, de Randstad Research, revela que solamente el 2% de las empresas que incorporan la inteligencia artificial en sus procesos ha recortado su plantilla, calificando este movimiento de inapreciable. Si bien este documento extrae sus conclusiones de encuestas, presenta una visión alentadora de la influencia de la IA en materia laboral. Al menos, a día de hoy. Según afirman mayoritariamente los empresarios de nuestro país, no hay una focalización hacia la destrucción de puestos de trabajo, sino un reto diferente. La meta se centra en recualificar a los empleados y que, de esa manera, puedan ser protagonistas a la hora de impulsar la competitividad empresarial.

Las empresas encuestadas por Randstad ven en la inteligencia artificial un puente para que su plantilla sea más eficiente y vayan desapareciendo las tareas más tediosas, sin perder en calidad. Desde ese punto de vista, prevén un futuro muy halagüeño. Y, actualmente, muchas están inmersas en transformar y reorganizar sus protocolos y procedimientos para implementar la IA. A su vez, una parte de los empresarios españoles consultados han manifestado que han contratado a nuevos trabajadores, precisamente, por haber incorporado la inteligencia artificial en su estructura. Y aventuran que, para paliar la falta de talento como problema indiscutible, la IA tendrá un papel fundamental.

Este panorama es aún más optimista según otros estudios, como el titulado Educación, formación y empleo en la era de la IA de la agencia de investigación 40dB . Lejos de reflejar la posible destrucción de empleo, este dossier destaca, por ejemplo, la inminente creación de nuevos que ni siquiera existen actualmente. Aunque se insiste en que esta evolución ha de ir acompañada de una intensa labor de formación, sea particular y/o auspiciada por las propias empresas. Y, fuera de ellas, se hace mención a los centros educativos, los cuales no deberían excluir la IA de sus programas.

 

 

 

impacto de la IA en el empleo
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Mejora de la eficiencia a través de GenIA-L

Un ejemplo de que las soluciones de inteligencia artificial pueden contribuir a incrementar la eficiencia de los empleados se está dando entre los profesionales del Derecho, y más ampliamente para el ámbito legal y jurídico. Un caso de éxito es el que está protagonizando Lefebvre que ha lanzado GenIA-L , un herramienta con tecnología de IA generativa que reduce los tiempos de trabajo en la práctica diaria, brindando respuestas completas y fundamentadas a consultas legales que aseguran una información sin sesgos -y minimizan el margen de error humano-.

GenIA-L recurre únicamente las bases de datos NEO y QMEMENTO de Lefebvre, lo que garantiza la seguridad en cuanto a la fiabilidad de los contenidos, y que estos estén actualizados, un aspecto de suma importancia en la materia. La información proporcionada incluye la fuente o fuentes de procedencia. A ello se suma la generación de conclusiones, los consejos que aporta y los argumentos tanto de jurisprudencia como de doctrina. Y el asistente también puede elaborar informes y análisis de gran complejidad, o explorar nuevas líneas de investigación.

Se automatizan de esta forma las tareas que consumirían una considerable cantidad de tiempo del trabajador, por ejemplo, en el caso de las plantillas de los bufetes de abogados. La IA conforma así un equipo con el capital humano, quien puede dejar de dedicar horas a búsquedas, documentación y conclusiones, pero no se ve sustituido. Por el contrario, puede centrarse en los aspectos más estratégicos de su trabajo, mejorando el servicio al cliente y aumentando su capacidad de gestión de casos.

Protección de datos y privacidad

GenIA-L resguarda la confidencialidad y la integridad de la información y de los datos, cumpliendo con los requisitos de privacidad y protección de datos. Y garantiza que sean utilizados bajo la ética y la legalidad, protegiendo los intereses y derechos del cliente final.

 

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