Aspectos clave del autónomo societario: responsabilidades, retribuciones y más

En esta nueva Guía de descarga gratuita que han trabajado los expertos en asesoramiento fiscal, laboral y contable de Adlanter ("Aspectos esenciales de la figura del autónomo societario"), se ofrece de manera detallada la información más importante que necesitas para entender y optimizar esta forma de emprendimiento.

Para hacernos una idea, un autónomo societario es una persona que, además de ser autónomo, tiene una participación importante en una sociedad mercantil (normalmente en una sociedad de responsabilidad limitada).

Una de las principales ventajas de ser autónomo societario es que, en general, su responsabilidad personal es limitada, a diferencia del autónomo “tradicional”, el cual responde de sus deudas con sus bienes personales.

Hay determinadas situaciones que implican obligatoriamente darse de alta como autónomo societario. Esto es, siempre y cuando se ejerzan funciones de dirección y gerencia que supongan desempeñar el cargo de consejero o administrador, o quienes presten otros servicios para una sociedad mercantil capitalista, a título lucrativo y de forma habitual, personal y directa, siempre que posean el control efectivo, directo o indirecto, de aquella.

¿Cuándo se entiende que hay un control efectivo? La respuesta es amplia, por lo que te recomendamos que lo consultas en esta Guía de descarga gratuita.

Otra de las principales cuestiones a tener en cuenta es el tema de las retribuciones: ¿nómina o facturar a la sociedad? La respuesta es compleja en algunas situaciones, ya que dependerá del tipo de participación en la sociedad, la actividad que lleva a cabo y la relación entre el autónomo y la sociedad.

Por último, otro de los aspectos más importantes que se deben conocer es la base de cotización y la cuota de los autónomos societarios: el pago mensual que debe hacer a la Seguridad Social todo autónomo que haya creado una sociedad.

Desde 2023, todos los autónomos, incluidos los societarios, pueden elegir entre varias bases de cotización en función de sus rendimientos netos, de tal forma que el autónomo societario puede ajustar su base en función de sus ingresos reales.

En conclusión, el autónomo societario se presenta como una figura atractiva para quienes desean emprender con mayor seguridad y posibilidades de expansión.