Crowdfunding para encontrar inversores en tu PYME
Cada vez más empresas (y no sólo las del sector de las nuevas tecnologías) recurren al ‘crowdfunding’ para financiarse o para encontrar inversores. Si decide hacerlo, vea qué cuestiones debe tener en cuenta.
Redactado por Apuntes&Consejos
¿Qué es? el Crowdfunding
El crowdfunding es un sistema de financiar proyectos empresariales en el que los inversores hacen préstamos o entran en el capital de la empresa que solicita la financiación:
- Plataforma. Las empresas que buscan financiación deben dirigirse a una plataforma de financiación participativa (PFP). Estas entidades (que deben ser autorizadas por la Comisión Nacional del Mercado de Valores) ponen en contacto a los inversores con la empresa que solicita financiación (tecleando en Internet “plataforma crowdfunding”, encontrará plataformas de este tipo).
- Solicitud. La PFP revisará la solicitud (el proyecto para el que solicita financiación, las características de su empresa...) y decidirá si la publica en su web. Generalmente, la PFP cobra un fijo y un variable según la inversión captada.
- Objetivo. Si la solicitud es aceptada, se fijará un plazo para que los inversores hagan aportaciones hasta cubrir el importe solicitado (se pueden ampliar el importe y el plazo hasta un 25% si se informa de ello al lanzar la campaña). Así, si su objetivo es recaudar 200.000 euros en un mes y no se consigue el 100% en ese plazo (o el 90% si así está previsto), la PFP devolverá las aportaciones a los inversores.
Proyectos. Mediante el crowdfunding puede financiar cualquier proyecto empresarial (el lanzamiento de un nuevo producto, la modernización de sus instalaciones...). Y según lo indicado, puede obtener la financiación de dos formas:
- Préstamos. En este caso, su empresa deberá devolver la cantidad prestada más intereses.
- Capital. Otra opción es ampliar el capital de la empresa para que la ampliación sea suscrita por los inversores mediante las correspondientes aportaciones económicas.
Si la solicitud es aceptada, se fijará un plazo para que los inversores hagan aportaciones hasta cubrir el importe solicitado
Si se financia mediante capital...
Socios. Muchas empresas utilizan esta segunda opción, pues no obliga a devolver las aportaciones a los inversores (la rentabilidad que éstos obtienen consiste en el posible cobro de dividendos y en el aumento de valor de sus participaciones). Sin embargo, ello supone dar entrada como socios a multitud de inversores (socios a los que deberá convocar a las juntas, que tendrán derecho de voto, que podrán pedir información sobre la empresa o solicitar una auditoría, etc.).
Cautelas. Por esa razón, si su empresa recurre a esta modalidad de crowdfunding, tome cautelas:
Modifique sus estatutos (y, si existe, el pacto de socios que tenga firmado) para regular la relación con esos nuevos socios. En concreto, modifique las mayorías para tomar acuerdos (para que estos nuevos socios no puedan bloquear las decisiones) y revise el régimen de transmisión de las participaciones (para que los socios actuales tengan preferencia para adquirir las participaciones de los inversores).
Considere la opción de que las nuevas participaciones que se emitan no tengan derecho de voto (aunque puede que esto reste “atractivo” a su proyecto, y que consiga menos aportaciones).
Es recomendable agrupar a todos los inversores para que el administrador pueda comunicarse con un único interlocutor. Por ejemplo, firmando un contrato en el que todos los inversores nombren a un representante .
En conclusión, el ‘crowdfunding’ es un sistema de financiación alternativo a los bancos en el que los inversores hacen préstamos o entran en el capital. Si recurre a esta segunda modalidad, tome cautelas para proteger a los socios actuales.